El seguimiento, clave

Los centros educativos acometemos hasta ahora el absentismo escolar mediante la aplicación de una orden autonómica que regula la prevención, el control y el seguimiento de los casos que surgen en los centros educativos. Pero también con contactos directos y reuniones trimestrales, en nuestro caso, con el Consejo Sectorial del Menor y con las educadoras sociales. Pero lo fundamental es trabajar en la prevención y realizar un seguimiento individualizado cuando aparecen las primeras situaciones. Y en este sentido, la figura del educador social en los centros educativos es fundamental. Nosotros hemos logrado que en nuestro centro el absentismo no exista y se puede comprobar que erradicando las primeras faltas de los alumnos se pueden evitar los casos posteriores. Para ello, el control se debe hacer diariamente con la colaboración del tutor, pero también manteniendo un contacto directo con las familias.