Uno de cada cuatro extremeños --es decir, unas 250.000 personas-- tiene el colesterol o los triglicéridos por encima de los niveles recomendados por los especialistas, pero tan sólo el 20% de los afectados consigue controlar esos índices correctamente, según los datos publicados en el último estudio de Hispalipid. Esto sitúa a la región como la comunidad autónoma con menor grado de éxito en la vigilancia de este problema de salud, uno de los factores de riesgo cardiovascular más habituales. Curiosamente, esta ausencia de control se multiplica entre los afectados de mayor riesgo ya que en este grupo sólo se someten a un control en consultas médicas el 10% de las personas que padecen este problema. Entre los afectados por colesterol de menor riesgo la cifra de los que llevan un correcto seguimiento médico asciende hasta alcanzar el 58%.
El estudio ha sido realizado por miembros de las sociedades españolas de cardiología y de arteriosclerosis. En él, Extremadura aparece como la sexta región con mayor número de casos (25,2% de los pacientes que acuden a consultas médicas). Sólo en Cataluña, País Vasco, Madrid, Murcia y Canarias estas afecciones tienen mayor incidencia sobre la población.
En este sentido, Luis Miguel Luengo, endocrino del Sistema Extremeño de Salud (SES), reconoce que los extremeños tienen mayor propensión a estos excesos de grasas "debido a la mayor incidencia de la diabetes y la obesidad", aunque destaca que "ante todo depende de la alimentación y del desgaste o ejercicio físico que se realiza".
AUMENTA EN LOS JOVENES El exceso de colesterol o de triglicéridos, dos problemas de salud encuadrados como dislipemias --las alteraciones de sustancias orgánicas en la sangre--, son afecciones que padecen mayoritariamente personas de entre 50 y 84 años. "Proceden de la acumulación de grasas y por tanto influye la edad, pero llama la atención que cada vez detectamos más problemas de este tipo en personas jóvenes en las que no lo esperábamos", apunta Luis Miguel Luengo. El motivo, en su opinión, son los cambios de hábitos de vida: "Antes se comía más sano y se realizaba mucha más actividad física, no deporte, pero sí actividad".
Asimismo, el endocrino del SES apunta que otras enfermedades como la diabetes de tipo II, habitualmente asociada a adultos con problemas de obesidad, está apareciendo a edades cada vez más tempranas.
Otra de las circunstancias que revela el estudio de Hispalipid es que las dislipemias se manifiestan con mayor intensidad a partir de los 55 años en el caso de las mujeres, mientras que en los hombres se retrasa a los 60 años. "La forma de producir colesterol es diferente. Las mujeres tienen mayor proporción de colesterol HDL, el considerado bueno, debido a los estrógenos, por lo que la producción se concentra en el colesterol LDL --o malo --", señala Luis Miguel Luengo, que agrega que en los hombres ocurre al revés "por la influencia de las hormonas masculinas".
MAS RIESGO PARA LA SALUD El informe también recuerda que el exceso de colesterol o de ácidos grasos suele ir acompañados por otras enfermedades o circunstancias que incrementan el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares. En este sentido, la mitad de los dislipémicos extremeños tiene hipertensión alta, el 34% obesidad, el 27% padecen diabetes tipo II y uno de cada cuatro lleva una vida totalmente sedentaria. A ello se suma el tabaco, un hábito al que son adictos el 12% de los pacientes de la región y por el que ha pasado otro 18% de los afectados.
"Cuando coinciden dos o más factores, el riesgo de sufrir algún problema cardiovascular se multiplica. Además, las posibilidades
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