La trayectoria de la presidenta del comité federal del PSOE, autoerigida en «única autoridad» del partido en estos momentos, transcurre en paralelo a la de la baronesa andaluza, Susana Díaz. Ambas se conocieron ya en la adolescencia, cuando coincidieron en un congreso de Juventudes Socialistas, a donde se afilió cuando apenas tenía 14 años. En cuanto cumplió los 18, se afilió al PSOE andaluz. En el terreno institucional, ha sido concejala en San Juan de Aznalfarache y diputada regional desde el 2004. Susana Díaz le encargó que pusiera orden en el PSOE de Sevilla, la única agrupación que no pierde elecciones.