El presidente de la Asamblea de Extremadura, Federico Suárez, entregó ayer a los tres grupos del arco parlamentario autonómico su propuesta de nuevo reglamento para la Cámara extremeña. El borrador introduce importante novedades sobre el documento actual, aprobado en 1983. El nuevo reglamento contempla más atribuciones para el presidente de la Asamblea aunque para compensar este apartado introduce la figura de la remoción del cargo, una especie de moción de censura contra el máximo representante parlamentario que sería pionera en España.

El objetivo de esta iniciativa es dar agilidad a los debates con medidas como las de reforzar el papel del presidente, otorgando más autonomía a su figura y contemplando la posibilidad de que pueda llevar asuntos a pleno. A pesar de ello, la presentación ha venido precedida de polémica y críticas de los grupos de la oposición en el Parlamento extremeño. PP e IU criticaron que Suárez presenta una iniciativa unilateral porque los trabajos de la Comisión del Reglamento --órgano que debía consensuar el texto-- llevaban cerca de un año paralizados. Ambas formaciones instaron a retomar las negociaciones para consensuar la propuesta.

LA PRINCIPAL NOVEDAD Del documento entregado por Federico Suárez, la principal novedad es la opción de poder presentar una moción de censura contra el presidente de la Cámara, extremo no contemplado hasta ahora. La propuesta debería ser por iniciativa de una parte de los parlamentarios y debería aprobarse por mayoría absoluta, a partir de la cual en caso de aprobarse habría de nombrarse nuevo presidente.

Además, con este borrador se pretende ganar agilidad y conseguir que el debate público coincida con el debate político. De igual manera, el documento pretende agilizar la tramitación de los asuntos parlamentarios y pretende introducir las nuevas tecnologías en la vida de la Asamblea.

Los diputados tendrán más derechos y deberes, al contemplarse un régimen específico por la no asistencia a órganos parlamentarios y que pueda fijar una posición distinta a la mantenida por su grupo. Además, no se impide la formación de grupos en atención a un número de diputados y se distingue entre el diputado no adscrito voluntariamente y el que lo es por expulsión.

Suárez también plantea en su propuesta la posibilidad de que los senadores por la comunidad puedan informar ante el pleno de los asuntos tratados en la Cámara Alta y que afecten a los intereses de Extremadura, así como que se potencia la comisión de Peticiones y Derechos Humanos a fin de equipararla a la figura del Defensor del Pueblo.

Con todo, el presidente del Parlamento extremeño aclaró que el borrador recoge sólo intenciones que ahora quedarán sujetas al debate entre los miembros de la comisión.