El agente José Manuel Sánchez Riera, que sobrevivió al ataque en el que murieron sus siete compañeros, recuerda que saltó del coche y salió corriendo entre una lluvia de balas. Ayer regresó a Madrid en el avión con el ministro Trillo, su jefe Dezcallar y los féretros de los siete fallecidos.

Las fuentes informantes señalaron que la resistencia iraquí va a realizar ataques indiscriminados contra todos los occidentales.