Las cifras del tabaco en Extremadura muestran a las claras cuál sería el impacto de la desaparición de este cultivo, concentrado, además en unas pocas comarcas. Así, las ayudas europeas suponen en torno a 120 millones de euros, el 80% de la renta global de los cultivadores.

Además, y un estudio de valoración de la incidencia del tabaco en el empleo, apunta a que las diversas labores relacionadas con el cultivo en la región equivalen a tener contratados a 5.578 trabajadores fijos a tiempo completo. En la situación más favorable, los cultivos sustitutivos apenas supondrían 2.000 empleos.