Las tarifas de los parkings extremeños no pueden ser más heterogéneas, no sólo en el precio, sino en el sistema de aplicación. De este modo, el minuto puede costar desde 0,013 euros hasta 0,25 (20 veces más caro) y hay algunos que aplican tarifas únicas, otros progresivas y unos cobran por entrar y otros ni siquiera cobran si se permanece menos de un cuarto de hora, incluso hay algunos que no cobran por minuto, sino por tramos de dos o tres minutos.
De este modo, en Cáceres los aparcamientos de Obispo Galarza y El Perú cobran la misma tarifa por minuto, 0,013 euros, pero el primero tiene abonos mensuales de 51 euros y abonos nocturnos a 35 euros y comercial a 31, mientras el segundo se limita a un bono de 24 horas por 7,5 euros. Mientras, el de Cánovas cobra a 0,02 euros el minuto, pero el máximo que se pagará durante el día es de 10 euros y seis euros si es de noche. Por el día completo se cobran 12 euros y por el mes 75 euros.
Por lo que se refiere a Badajoz, el de Santa María presenta una peculiaridad: se cobran cinco céntimos pero por tramos de tres minutos, y por las noches la hora en lugar de salir por un euro sale por 60 céntimos. También es particular el caso del de San Antón: es el único que cobra por el hecho de entrar (60 céntimos), cuestión muy criticada por la Unión de Consumidores al considerar que, puesto que tal como se entra se está tarifando ya por minutos, la realidad es que se está cobrando dos veces por la misma plaza. El minuto cuesta 2,25 céntimos para las primeras diez horas. A partir de ahí, se deja de cobrar. El día entero cuesta 13,5 euros.
También el de Menacho (en la capital pacense igualmente) tiene un sistema peculiar. El minuto cuesta 2 céntimos, pero hay recargos según el tiempo. Así, si se está 10 minutos se pagarán los 20 céntimos más un recargo de 2 céntimos; si se está 30 minutos, 60 céntimos y un recargo de cinco, y si se está una hora, 1,2 euros más un recargo de 10 céntimos.
Por lo que se refiere a Mérida, los de Atarazanas y Politécnica coinciden en precios: 1,33 céntimos el minuto, hasta un máximo de 11,95 euros por día y un abono nocturno de 21 euros. Se cobran tres euros por la tarjeta de abonado y el de Atarazanas tiene un abono mensual de 42 euros.
En cuanto al de Fernández López, el único subterráneo de la capital emeritense, sus tarifas varían según el tiempo: por el primer minuto se cobran 25 céntimos; del segundo al cuadragésimo quinto, 2,5 céntimos por minuto, y a partir de ahí, 2,2 céntimos por minuto.
Dispone de un abono para funcionarios (horario de 7,30 a 15,30) aprovechando su proximidad a las consejerías, que cuesta 54,7 euros al mes, y de un abono mensual de 66,9 euros al mes.
Respecto al que gestiona ADIF junto a la estación de ferrocarril, cobra a 2 céntimos el minuto durante la primera media hora, y a partir de ahí a 1,5 céntimos. Las particularidades de este aparcamiento es que si se está menos de 15 minutos sale gratis, y practica el redondeo a la baja hasta múltiplos de cinco céntimos. El coste máximo por día es de 9 euros.
Finalmente, el de Puerta de Talavera, en Plasencia, tiene uno de los sistemas más curiosos. Los primeros tres minutos se cobran 5 céntimos, los dos siguientes, otros cinco, los tres siguientes, de nuevo cinco, y así sucesivamente. Es decir, si estás tres minutos pagas a 1,6 céntimos el minuto, pero si estás cinco minutos, cada uno de ellos te cuesta un 33% más. Además, hay un recargo de 10 céntimos por cada hora completa.
