Las inspecciones de Trabajo en Extremadura han sacado a la luz 12,5 millones de euros ocultos en actuaciones fraudulentas a la Seguridad Social a lo largo del año 2007. Esto supone 863.122 euros más que los liquidados en el año 2006 por esta misma causa. La actividad inspectora también se deja notar en otros aspectos laborales y han permitido a lo largo del pasado año, por ejemplo, 1.153 altas en la Seguridad Social (196 menos que un año antes) y el levantamiento de 1.614 actas con infracciones (133 menos que en el 2006). Los datos facilitados por el Ministerio de Trabajo evidencian la notable actividad fraudulenta que se comete en los centros de trabajo de la comunidad extremeña y del resto de España, sobre todo en cuestiones relacionadas con las altas laborales y la contratación irregular de inmigrantes.
La mayor parte de estas penalizaciones son por causa de irregularidades en la contratación. En este sentido, esas visitas han provocado que 1.564 trabajadores vieran como pasaron a ser indefinidos. Además, los inspectores detectaron fraude en materia de falta de inscripción, afiliación y alta; así como en asuntos relativos a la cotización.
Todas estas cifras se han descubierto debido a las 16.812 actividades realizadas por los inspectores, 850 más el último año sobre el anterior, y que han supuesto 1,4 millones de euros en sanciones, 575.157 euros más que en el año 2006. Se da la circunstancia de que el fraude a la Seguridad Social es mucho más significativo en la provincia de Badajoz que en la de Cáceres. Baste un dato, de los 12,5 millones ocultos en actividades fraudulentas en la región durante el pasado año, 8 (el 65%) se han descubierto en centros de trabajo pacenses.
Por otro lado, la actividad de la Inspección de Trabajo durante el año 2007 en Extremadura deja otros datos relevantes. Uno destacado es que, pese a que ha habido menos visitas a los centros de trabajo (62 menos el pasado año), se ha disparado el importe de las sanciones tras la visita de los inspectores. Así, el pasado año las multas alcanzaron los 5 millones de euros, frente a los 3,5 en el año 2006.
Asimismo, toda esa labor de los inspectores ocasionaron el levantamiento de 3.618 actas por infracciones, una decena menos que en el año 2006, afectando a 8.142 trabajadores, un millar más que los que se vieron implicados un año antes.
Otra cuestión importante es que fruto de esa labor de control en los centros de trabajo, el pasado año se paralizaron 43 obras en la comunidad autónoma, 9 menos que en el 2006.
