El trazado del tren de alta velocidad entre Madrid y Lisboa recorrerá 230 kilómetros por territorio extremeño (distancia en la que no están incluidos los futuros accesos a Cáceres, Mérida y Badajoz), que quedan divididos en tres tramos: Talayuela-Cáceres, de 128 kilómetros; Cáceres-Mérida, de 41 y Mérida-Badajoz, de 36.
Aunque un tercio de esta longitud (76,7 kilómetros) se encuentra ya en obras, el nivel de ejecución del AVE extremeño es muy desigual según de qué tramo se trate. De esta forma, los cuatro subtramos que están en obras actualmente se encuentran entre Cáceres y Badajoz. Se trata de los que unen Cáceres y Aldea del Cano, Aldea del Cano y Mérida, Mérida y Montijo y Montijo y Badajoz.
De hecho, prácticamente todo el tramo Cáceres-Mérida-Badajoz está en ejecución o adjudicado, a excepción de los accesos a las ciudades --que suman 70 kilómetros-- y cuenta con una partida de 160 millones de euros en los presupuestos estatales. Por contra, en el recorrido que discurre por Castilla-La Mancha hasta Cáceres, pasando por Navalmoral y Plasencia, el proyecto acumula mucho mayor retrasado. De todo el trayecto entre Talayuela y Cáceres se ha adjudicado la redacción de proyecto de cuatro subtramos, que tienen una longitud conjunta de 26 kilómetros: Grimaldo-Casas de Millán, Casas de Millán-Cañaveral, Cañaveral-Embalse de Alcántara y Embalse de Alcántara-Garrovillas. Además, se ha licitado la redacción de otros cinco subtramos.
