El tren es el medio de transporte que mejor está resistiendo a la crisis económica y la subida del precio de los carburantes. Y no solo está aguantando la tormenta, sino que sus resultados, en lo que se refiere a número de pasajeros en las líneas que enlazan con Extremadura, son aún mejores que el año pasado. No está ocurriendo lo mismo en el resto del sector. Tanto el transporte aéreo como el que se realiza por carretera están perdiendo usuarios en la región.

Los datos facilitados por Renfe ponen de manifiesto que el ferrocarril está pasando por un buen momento en la comunidad autónoma, al menos en lo que se refiere a la demanda. A pesar de que la situación económica está apretando los bolsillos de los ciudadanos, que el tren hotel Lusitania --que enlazaba a diario Madrid y Lisboa a través de Cáceres y Valencia de Alcántara-- está actualmente desviado por la provincia de Salamanca, y que la compañía ferroviaria ha incrementado en torno a un 4% sus tarifas este año, la cifra de viajeros ha aumentado en los trenes de media distancia con salida o llegada en Extremadura. Así, solo durante los seis primeros meses del año, estas líneas han registrado 302.519 pasajeros, lo que supone 13.600 más que en el mismo periodo del 2007.

Este incremento interanual, próximo al 4%, se produce tanto en los trayectos que se realizan por la línea Madrid-Cáceres-Badajoz, como por la que enlaza la capital de España con la región a través de Ciudad Real, confirman estas fuentes. No obstante, la primera es la más utilizada, con un total de 208.900 pasajeros entre enero y junio (casi 10.000 más que el año anterior).

En cuanto al transporte aéreo, el aeropuerto de Talavera la Real ha visto reducido su volumen de tráfico durante la primera mitad del año. La cifra de pasajeros que han partido de la terminal pacense o que han aterrizado en ella en el primer semestre se ha quedado en 46.882 personas, un 8,3% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior.

CAMBIO DE TENDENCIA. Esta tendencia negativa es una novedad para unas instalaciones que terminaron el 2007 con un incremento anual del 13% en lo que se refiere a usuarios. Por tanto, la crisis y las dificultades por las que pasan las economías domésticas están haciendo mella en el aeropuerto extremeño. Todo ello en medio de un contexto en el que las principales compañías aéreas están aplicando subidas en el precio de los billetes para hacer frente al incremento del coste de los combustibles. De momento, Air Nostrum, filial regional de Iberia y que cubre todos los servicios de las instalaciones de Talavera la Real, no ha confirmado ningún movimiento en este sentido.

El transporte por carretera ha sido el que con más ha notado los perjuicios que le está ocasionando la actual situación económica, especialmente por el alza de la gasolina y el gasóleo. De hecho, parte del colectivo, el dedicado a las mercancías, protagonizó en mayo una huelga que tuvo casi paralizado a gran parte de la industria y el comercio durante una semana. El Gobierno tuvo que sentarse a negociar con los representantes de los transportistas para poner en marcha una serie de medidas que permitiese a estos hacer frente al incremento del coste de los combustibles.

Pero la situación también está comenzando a asfixiar a la otra parte de este subsector. Las compañías de transporte de viajeros aseguran que los gastos cada vez son mayores, por la subida de los carburantes, y los ingresos están cayendo debido a un descenso en la cifra de pasajeros.

"A priori pensamos que la situación económica nos podría beneficiar. Pero los ciudadanos, en lugar de dejar el coche para usar más el autobús, están reduciendo sus salidas. Si antes realizaban cuatro viajes al mes con nosotros, ahora se moderan y hacen dos", asegura Félix Rodríguez, jefe de Explotación de Auto-Res, una de las compañías de autobús interurbano con mayor presencia y servicios en Extremadura. Rodríguez reconoce que en las líneas que cubre la región y que conectan ésta con Castilla-La Mancha y Madrid "hemos notado un descenso del número de pasajero, al igual que está ocurriendo en el resto del país".

MALAS EXPECTATIVAS Autor-Res no avanza datos concretos sobre número de viajeros en la región. "Son datos confidenciales", alegan. Pero sí muestran su preocupación por la situación que están viviendo, aunque de momento descartan que esta reducción de la cifra de usuarios pueda poner en riesgo alguna de las líneas con Extremadura.

Para compensarlo, el Gobierno, que es el que fija los precios de los billetes en la concesión a esta compañía, ha aprobado un adelanto del incremento de tarifas previsto para abril del año que viene. Así, desde julio, viajar en autobús se ha encarecido un 3%.

La recesión también se está notando en los servicios de autobús urbano. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), relativos al mes de junio, la cifra de ciudadanos que utilizan este medio de transporte en las localidades que cuentan con ellos cayó un 1,5% en Extremadura respecto al mismo mes del año anterior. En lo que va de año, el descenso acumulado es algo más leve (0,6%).

Los taxistas son otro escalón del sector que se está viendo perjudicados por la actual evolución de la economía. "Calculamos que cada taxista va a tener un sobrecoste de unos 1.200 euros este año solo por la subida del gasóleo", asegura Salustiano Marabel, presidente de Radio Taxi en Badajoz. Además la cifra de clientes "ha bajado un 25% respecto al 2007", comenta.