El tren extremeño ha perdido en los primeros diez meses del año un 5% de viajeros, lo que supone que si se mantiene la tendencia hasta finales del 2002 Renfe habrá perdido 32.000 pasajeros en sólo un año. De esta forma, continúa el descenso de usuarios del ferrocarril que se viene repitiendo durante los últimos años en la región, hasta el punto de que por primera vez las estaciones extremeñas podrían recibir menos de 600.000 viajeros en un año.

En los primeros diez meses del 2002 Renfe ha perdido un 5% de usuarios en Extremadura, según confirmaron a EL PERIODICO EXTREMADURA fuentes oficiales de la propia compañía ferroviaria. Este dato supone, entre otras cosas, la confirmación de la tendencia iniciada hace ocho años, cuando el tren era utilizado cada año por casi un millón de viajeros. En ese periodo el número de pasajeros del tren ha caído algo más de un 40%, de forma que, si continúa esta bajada en los últimos meses del 2002, éste será el primer año en el que el ferrocarril es utilizado por menos de 600.000 extremeños. Las previsiones son preocupantes y desvelan que el ferrocarril ha perdido más de 85.000 viajeros durante los últimos 24 meses.

CADA VEZ PEOR

La situación del transporte ferroviario en la región es cada año peor, puesto que se está produciendo una lenta y constante pérdida de pasajeros. Así, el año pasado el descenso se situó en el 8% y se centró en las líneas de largo recorrido, puesto que los recorridos regionales ganaron un 3% de viajeros. Sin embargo, en el 2002 la situación ha empeorado, puesto que han perdido usuarios --aunque sea en menor medida-- tanto las grandes líneas como los trenes regionales, según las fuentes consultadas por este diario.

Con todo, si en 1994 eran más de 2.700 los extremeños que cada día utilizaban el tren, en la actualidad esa cifra ha descendido hasta los 1.634, es decir, 1.000 viajeros menos al día.

El problema, según señalan expertos y dirigentes sindicales de Renfe, es que el tren extremeño sigue perdiendo competitividad a pasos agigantados con otros medios de transportes, tanto por precios como por los actuales horarios y los tiempos de viaje. Además, esta situación podría agravarse a medida que se vaya completando la red de carreteras de gran capacidad con las nuevas autovías previstas tanto por la Junta como por el Ministerio de Fomento.

Mientras, la Consejería de Transportes y el Ministerio de Fomento mantienen suspendidas las negociaciones para la firma de un convenio que posibilitaría una inversión millonaria en la red convencional de ferrocarril durante los próximos años. El problema, según la Junta, es que Renfe no se compromete a mejorar las actuales líneas renovando las infraestructuras, tanto vías como trenes. Por eso, la Junta se niega a mantener lo que considera "un tren anticuado".

Por su parte, el presidente del Comité de Empresa de Renfe en Extremadura, Manuel Nicolás Taguas, de Comisiones Obreras, considera que la pérdida de viajeros en lo que va de año es "la consecuencia lógica" del "deterioro" que ha soportado la red regional en los últimos años.

Lo que está claro, asegura, es que "cada vez hay peores trenes, tenemos el peor Talgo de toda España y encima se restringen algunas líneas, como Jabugo-Zafra". Taguas indica que si a esto se suman unos tiempo de viaje "muy poco competitivos" el resultado "es que las cuentas sean así y que cada vez haya menos viajeros". En su opinión, el único camino para cambiar esta tendencia es mejorar horario y tiempo de viaje, ya que los actuales no se adecúan a las necesidades reales.