El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, disfruta de la exaltación de la Semana Santa, festividad que vive en primera persona en su localidad, Olivenza, como hermano de la Cofradía del Descendimiento, en la que entró a formar parte con tan solo 10 años. Además, hace ya 20 años, desde 1988, es capataz del paso de la Virgen de la Soledad; es, en definitiva, el que organiza y dirige al grupo de costaleros de este paso, tarea que ningún año elude. Así lo atestiguaba tras su designación como candidato a la presidencia de la Junta la propia mayordoma de la Virgen de la Soledad, Carmen Díaz, al indicar: Vara "lleva el paso maravillosamente y no ha fallado ningún Jueves ni Viernes Santo".