Si no cumplen el acuerdo del AVE, quién querrá luego volver a firmar nada con Portugal. Sería la primera vez que un país incumple un acuerdo de este tipo". Bajo esta premisa, el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, en declaraciones a este periódico, da por sentado que al final el futuro Ejecutivo luso que salga de las urnas tras las elecciones legislativas del 27 de septiembre cumplirá con el pacto de la línea de alta velocidad que unirá Madrid y Lisboa por Extremadura.

JUGAR CON LOS SENTIMIENTOS El jefe del Ejecutivo autónomo considera que el cara a cara de la noche del sábado entre el candidato socialista a la presidencia de Portugal, José Sócrates, y la líder del Partido Social Demócrata, Manuela Ferreira Leite, debe inscribirse dentro del clásico rifirrafe electoral, si bien criticó que Leite "este jugando con los sentimientos más primarios de la sociedad, algo típico de la derecha en la mayoría de los países", lanzando para ello a la población el mensaje de que el AVE no es prioritario y que no le importa incumplir los compromisos firmados por el anterior gobierno conservador, como le recordó Sócrates, cuando ella era responsable de Hacienda con Durao Barroso de primer ministro.

A juicio de Fernández Vara, Portugal no puede revocar unilateralmente un proyecto "que no es de España ni de Portugal exclusivamente, sino de la Unión Europea". Más aún, cree que al final imperará la cordura, "porque ahora el PSD lo que está haciendo es caricaturizar la realidad", y el futuro Gobierno seguirá adelante con el proyecto.

RETIRADA DE FONDOS De no ejecutarse el proyecto en los términos firmados en Figueira da Foz en 2003 por la propia Ferreira Leite, el presidente extremeño asegura que pedirán a Bruselas que la subvención concedida "no la puedan emplear en otros proyectos. De todas maneras, no creo que el presidente de la Comisión, Durao Barroso, permita que sus compañeros de partido incumplan ese acuerdo".

Respecto a las críticas de la líder del PSD sobre las presiones y peticiones contra ella de los socialistas lusos de las regiones fronterizas y de los alcaldes españoles de la zona, Fernández Vara considera legítimo hacerlo. "Hay que respetar lo que salga de las urnas, pero extremeños y alentejanos nos jugamos mucho y por eso no podemos estarnos de brazos cruzados, máxime cuando el 70% del tramo español ya está en marcha".