El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, mostró ayer su confianza en que la huelga de Justicia se resuelva "con diálogo", subrayando al respecto que es al ministro de Justicia en funciones, Mariano Fernández Bermejo, al que corresponde hacerlo. "Espero que la vía del dialogo sea la que solucione las discrepancias y por supuesto quien lo tiene que hacer es el ministro de Justicia", dijo en Bucarest, donde asiste a la Cumbre de la OTAN y en respuesta a las preguntas sobre las peticiones sindicales de dimisión del ministro.

Zapatero declinó hablar de "caos histórico" en la Justicia española y afirmó que "es una huelga de un servicio público importante, que no es excepcional", dado que en España existe el derecho a la huelga. El presidente del Gobierno en funciones recordó, además, que para resolver la huelga ya se había llegado a un principio de acuerdo, por lo que lamentó que los funcionarios "no validaran el acuerdo que ya se había alcanzado con los representantes sindicales", porque esto, a su juicio, "no es un buen precedente", manifestó.