El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha pedido a las entidades financieras manga ancha con los promotores. En una reciente intervención en el Foro ABC señaló que "desde la perspectiva del Gobierno, la fortaleza del sistema económico aconseja que las entidades de crédito, aun manteniendo el principio de seguridad, estén abiertas para seguir teniendo un nivel razonable de crédito para la economía, en particular para el sector inmobiliario".

Pretende con ello que la crisis financiera no repercuta en la concesión de hipotecas. En todo caso, la deuda de las inmobiliarias superó en el segundo trimestre del año los 282.000 millones de euros. Aseguró que este sector representa el 6% del PIB nacional. Las entidades de crédito, dijo, se encuentran a la expectativa debido a las turbulencias financieras por la crisis existente en EEUU, y precisó que "no hay ningún atisbo de recesión" que justifique esta situación.