Toda Ley cuenta con dos elementos esenciales: la población a la que afecta y el territorio donde se aplica. La Ley de la Extremeñidad es una ley que a diferencia de otras, tiene una limitación que le confiere una característica especial respecto a lo afirmado anteriormente. La población a la que se aplica no reside en el territorio donde reside el gobierno que tiene que ejecutar y desarrollar los principios que inspira dicha ley, por tanto su capacidad de influencia en dicho gobierno es limitada, así como en el parlamento que la aprobó.

A nadie se le escapa que la situación de Extremadura hoy ha cambiado profundamente respecto a cuando se producían emigraciones anuales constantes, y que la situación de quienes fueron emigrantes extremeños en su lugar de residencia y respecto a Extremadura, no es la misma que la de a principios de los ochenta.

Dicho de otra forma, el mandato del Estatuto de Autonomía de Extremadura que en su artículo 6.2i plantea el asumir como actuación básica por parte de los poderes públicos, la defensa de los extremeños a vivir y trabajar en su tierra, y crear las condiciones que faciliten el regreso a la misma de sus emigrantes, está bastante avanzado en su cumplimiento, ya que si bien no puede darse por cerrado como mandato público, sí queda claro para cualquier observador neutral en el año 2003, que la situación de Extremadura respecto a los movimientos migratorios, ha cambiado radicalmente respecto al año 1983 que es cuando fue aprobado el Estatuto de Autonomía de Extremadura.

NUEVOS CONTENIDOS

La Sociedad de la Información y la Comunicación y el desarrollo de las nuevas tecnologías, pueden revolucionar profundamente los contenidos de la extremeñidad. La siembra que a través de los años se ha realizado para impulsar la participación de los emigrantes extremeños en los asuntos de Extremadura, la impregnación de contenido de extremeñidad que tiene una buena parte de la normativa extremeña, la voluntad en sí de una parte importante de quienes fueron emigrantes de seguir formando parte del ser y sentir de Extremadura, puede dar importantes frutos de los que pueden beneficiarse el conjunto de los extremeños.

Para pasar a un plano teórico-práctico conviene desarrollar algunas de las posibilidades que se abren o se complementan en la Ley de la Extremeñidad, a través del desarrollo de las nuevas tecnologías, puede decirse que en muchos casos se trata simplemente de adaptar lo realizado a las perpectivas que se abren; en otros casos, se trata de desarrollar lo que hasta el momento era muy difícil o imposible, y que la red de internet, videoconferencias y otros medios posibilitan.

AMPLIACION DE INTERES

Tras la experiencia que se ha desarrollado a través de los Servicios de Orientación a la Emigración, y los Puntos de Información de Extremadura, sería de enorme interés la ampliación de los mismos, desarrollando especialmente los nuevos medios de información y comunicación.

Estos puntos pueden estar apoyados en la red de Asociaciones Extremeñas, y pueden crear el marco idóneo desde donde se diera a conocer a Extremadura a través de la red. Los materiales ya existen en las múltiples páginas webs existentes, solo falta el organizar la gestión de los puntos, y concretar su funcionamiento.

El concepto de embajada de Extremadura que se ha utilizado en más de una ocasión para definir a las asociaciones de extremeños en el exterior, podría acercarse a la realidad.

La implantación de los Puntos de Información, daría cumplimiento a gran parte del contenido en la Ley de la Extremeñidad, ya que el derecho a la información planea constantemente en el conjunto de su articulado.

Otro concepto de punto de información, es el que debe establecerse a través de convenios con los consulados españoles para informar principalmente de todo lo relacionado con el retorno y el mantenimiento de relaciones con los extremeños y sus descendientes que siguen siendo españoles aunque no regresen a España.

COMERCIO Y SERVICIOS

El comercio y la prestación de servicios electrónicos en la red, en no mucho tiempo, será algo tan normal como entendemos el comercio tradicional. Extremadura, por la calidad de sus productos, puede ocupar un espacio en el mercado de la red que trascenderá a los aproximadamente tres millones de personas a los que le son de aplicación de la Ley de la Extremeñidad.

La modalidad de Comercio Electrónico de Bienes y Servicios Extremeños, puede generar un gran contingente de empleo, del que puede participar no sólo los residentes en Extremadura a través de la producción, sino los extremeños residentes en otros lugares a través de la distribución.

Preguntas que hasta hace muy poco tenían una respuesta negativa, en los momentos actuales, y cada vez en mayor medida la tendrán positiva. A título de ejemplo podrían citarse: ¿Qué inconvenientes tiene un extremeño para tele-trabajar prestando servicios a empresas que están ubicadas en otras regiones o países? o ¿en caso contrario, extremeños residentes fuera de Extremadura teletrabajando para la región?

Por gran parte de la sociedad empieza a aceptarse que los mercados, van a tener una gran transformación en los próximos años y entre ellos el mercado laboral; por tanto, es necesario iniciar más pronto que tarde la adaptación a los mismos. Extremadura, como muy bien expresa su presidente, Rodríguez Ibarra, tiene ahora la oportunidad de no perder la revolución que ya no se avecina sino que está entre nosotros.

OCIO Y TIEMPO LIBRE

Los hábitos sociales están cambiando de forma acelerada y cada vez existe más tiempo para dedicar al ocio y tiempo libre. Extremadura, como demuestran diversos estudios tiene un potencial turístico importante dentro del país, que en los últimos años ha empezado a mostrar a través de diversas campañas de publicidad.

Los métodos y medios para atraer turistas están cambiando a un ritmo acelerado, hoy a través de la red pueden visitarse los sitios más lejanos y organizar los viajes.

Extremadura en los destinatarios de la Ley de la Extremeñidad, tiene un gran mercado que necesita ser organizado, ya que existe una necesidad potencial de reencontrarse con las raíces culturales y sociales. El turismo virtual puede convertirse en turismo real, ya que cada pueblo de Extremadura tiene algo que ofrecer, y además con los más de 900.000 embajadores que existen de los municipios extremeños repartidos por toda España complementan la difusión en la Red.

El último gran bloque de atención a desarrollar desde la extremeñidad, es el relacionado con la cultura. En Extremadura, todas las manifestaciones culturales existentes pueden ser focos de desarrollo local. Piénsese en las diversas iniciativas culturales locales existentes, que contando con una gran calidad, solo han entrado en el círculo del mercado, cuando grandes campañas de publicidad las han acompañado.

En el ámbito de la cultura pueden jugar un importante papel una parte importante de los destinatarios de la Ley de la Extremeñidad. Entre ellos existen escritores de renombre internacional, pintores, escultores... Recuperar para la extremeñidad la colaboración y participación de muchos de estos personajes puede ser más fácil a través de la cercanía que ofrece la Red.

Otro foco importante a potenciar, es el que se da en el retorno de las más de cien asociaciones de extremeños en el exterior existentes. Las más de 2.000 actividades de contenido extremeño que anualmente realizan pueden tener en la red una difusión que hasta ahora ha sido imposible poderla realizar.