De qué sirve que conozcamos a alguien a través del MSN si cuando desaparece por voluntad propia o ajena no hay manera de encontrarlo.Creo que las antiguas cartas y el teléfono de casa de toda la vida eran más prácticos, ¿no les parece? Bueno, J. M. Gómez Custodio de Cáceres espero tener noticias tuyas pronto. lolizr@hotmail.com Gracias