Una Vez finalizada las vacaciones estivales, se puede decir que la Rivera de Acebo y, más concretamente, las piscinas naturales de esta localidad serragatina han vuelto a ser el destino más visitado por los veraneantes que eligieron esta comarca para disfrutar de su tiempo de ocio.Sin lugar a dudas, la anterior Corporación Municipal de Acebo realizó una de las mejores inversiones productivas que se han gestionado en este municipio serragatino al adquirir varias fincas privadas para adaptarlas como zonas de baño, además de construir dos magníficos complejos hosteleros que han generado importantes puestos de trabajo locales y que a su vez se han convertido en una buena fuente de ingresos para ese cnsistorio.Lejos quedan los tiempos en los que este turismo rural era calificado despectivamente en un artículo de la revista Interviu de "turismo de tortilla de patata y casera".Hoy en día hemos de reflexionar y valorar la actual situación ya que nos enfrentamos ante un nuevo reto como es el de la masificación de esta zona de ocio. Este asunto demanda la actuación conjunta de todas las Administraciones Públicas Ayuntamiento de Acebo, Consejería de Medio Ambiente, Consejería de Obras Públicas, Ministerio de Fomento, Confederación Hidrográfica del Tajo, etcétera, implicadas en la gestión de este entorno rural.La masiva afluencia de turistas a esta zona en los meses de julio y agosto requiere tomar, al menos, las siguientes medidas: 1.- Instalación de un puesto permanente de asistencia sanitaria que cuente con algún desfibrilador y material para primeros auxilios ya que actualmente sólo se dispone de los botiquines que se puedan encontrar en los establecimientos hosteleros. 2.- Permitir al Ayuntamiento de Acebo la habilitación de otras piscinas naturales que han existido tradicionalmente como zonas de baño con el objeto de descongestionar las actuales. 3.- Reforma del tramo de carretera que va desde el casco urbano hasta las piscinas naturales, así como la incorporación a la misma de un arcén o un carril bici ya que el incremento de tráfico automovilístico en esta vía de circulación está provocando un elevado riesgo de accidentes, además de poner en peligro la vida de los viandantes y cicloturistas que eligen medios nativos para acceder a esas zonas de baño. 4.- Regulación del estacionamiento de los vehículos de locomoción que aparcan en las proximidades de las piscinas naturales debido a que el estado actual provoca situaciones caóticas que se plasman en la ocupación de parte de la carretera y en la invasión de fincas privadas. 5.- Vigilancia permanente por parte de las fuerzas del orden de estas zonas de ocio ante la excesiva aglomeración de personas. 6.- Labor de concienciación ecológica y medioambiental entre los turistas para compatibilizar desarrollo con sostenibilidad y de esa manera evitar que la Rivera de Acebo se degrade. Los aceban@s hemos conservado esta zona de baño en inmejorables condiciones durante estos últimos setenta años de turismo rural, como así lo demuestra la actual demanda turística y por tanto queremos que continúe como hasta ahora.Jesús Carlos Rodríguez Arroyo

Vecino de Acebo