El FIB (Festival Internacional de Benic ssim) anunció el año pasado que no escatimaría esfuerzos cara a confeccionar el cartel de la décima edición que se celebrará los días 5, 6, 7 y 8 de agosto. Lo que no dijeron es que la decana cita de pop independiente uniría a tres nombres fundamentales para entender cómo la música moderna es hoy como es.
La próxima edición del FIB (o FIB Heineken, en virtud del renovado contrato de patrocinio con la empresa cervecera) tendrá como cabezas de cartel a Brian Wilson (líder de los Beach Boys), Lou Reed y Kraftwerk. Los pilares del pop psicodélico, el rock experimental y la música electrónica.
Es el cartel de perfil más clásico (también actúan Paul Weller, Love y Wire) y ambicioso de una carrera marcada por el declive del brit-pop y el auge de la electrónica. "Llevábamos dos años detrás de Brian Wilson y Kraftwerk", reconocía el codirector del FIB Miguel Morán. La casualidad ha querido que en el 2004 ambos estuvieran disponibles. Por contra, el pop inglés de los 90 apenas tiene presencia. "Si hay que tirar de Oasis como último recurso, se hace, pero este año no hacía falta", descarta Morán. El FIB 2004 prescinde de Blur, Suede y otros habituales. A cambio, Brian Wilson interpretará el inconcluso disco de los Beach Boys Smile, Lou Reed repasará su trayectoria en solitario y con la Velvet Underground y Kraftwerk escenificará sus tres décadas de arquitectura sonora. Buen negocio.
No obstante, y tras esta lujosa tripleta, el FIB cuenta también con clásicos forjados en el propio festival. Es el caso de The Chemical Brothers, Belle And Sebastian, Tindersticks y The Charlatans. Cualquier otro año, artistas como Pet Shop Boys, Air, Lambchop, Yann Tiersen, Armand Van Helden o Einsturzende Neubauten hubiesen llamado más la atención, pero en esta edición quedan algo ensombrecidos por tres cabezas de cartel que bien podrían haber protagonizado un festival de carácter más generalista.
Como toda baraja necesita cuatro ases, el FIB-2004 espera confirmar otro artista de primer nivel. Descartado R.E.M. (que está grabando disco) y Morrissey (a no ser que reconsidere su presencia en el festival Loolapalooza), los que tienen más posibilidades son, por este orden, The White Stripes, The Strokes y Björk. Hasta la fiesta de inauguración del jueves contará con una estrella de primera división. Será el veterano Paul Weller, quien cerrará un prólogo acorde con los fastos del décimo aniversario y en la que también actuarán The Shins, Ash y Felix Da Housecat.
Un año más, el FIB tendrá un aforo de 35.000 espectadores. Pese a que se ampliará la zona de acampada, no hay previsto aumentar las dimensiones del recinto.
Los abonos salieron a la venta el pasado 5 de mayo a un precio de 140 euros, para los tres días, y a 152, para quienes deseen asistir a los conciertos del jueves.
