Un estudio da un importante toque de atención a la población universitaria que señala como un sector de alto riesgo cara a sufrir trastornos del comportamiento alimentario (TCA), tales como la anorexia o la bulimia. Así, recoge que un 14,9% por ciento de varones y el 20,8% de mujeres universitarias están en este grupo de riesgo. La investigación se ha realizado en la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y sus resultados se dieron a conocer en el V Congreso Virtual de Psiquiatría Interpsiquis 2004.
La encuesta, realizada en 13 facultades de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y en la que participaron 2.386 alumnos (el 31,4 por ciento de varones y el 67,9 por ciento de mujeres) de entre 18 y 30 años, evaluó aspectos relativos a los trastornos alimentarios, la imagen corporal, la psicopatología mental y la autoestima de los estudiantes, adscritos durante el año académico 2000-2001.
Según la investigación, avalada por el Servicio de Epidemiología del Instituto de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, "la tasa de prevalencia de población de riesgo de TCA en el ámbito universitario es elevada, encontrándose un predominio en el género femenino". Por ello, insisten en la necesidad de llevar a cabo programas y medidas preventivas dirigidas a este colectivo.
En concreto, el 9,6% de los varones y el 16% de las mujeres afectados por este tipo de trastornos reconoció provocarse vómitos. Asimismo, un 10,6% de los universitarios utilizaba laxantes para controlar el peso, frente al 14,5% de las universitarias.
PERFIL DE RIESGO
El perfil de riesgo masculino para estas patologías es distinto que el femenino, ya que se origina por la presión de un ideal de belleza muscular, no de delgadez, explican los especialistas.
Además, los resultados de esta encuesta concuerdan con otros estudios que reflejan la asociación de estos trastornos alimentarios con otros síntomas psiquiátricos como la obsesión, depresión o ansiedad.
A pesar de que la población de jóvenes universitarios es considerada un grupo importante de riesgo de padecer anorexia o bulimia influenciado por el ambiente "no existen estudios rigurosos que abarquen a este colectivo", denuncian los autores de la investigación. Además, también habría que analizar cómo evolucionan los síntomas hasta desencadenar un cuadro incompleto o a uno definido y grave, dicen.
