Cuando parecía superado cara a la galería el debate sobre la continuidad del festival Womad en Cáceres a mediados de diciembre se disparó la alarma sobre el futuro de este festival multiétnico en la ciudad. El Consorcio Gran Teatro --integrado por Junta, diputación, ayuntamiento y Caja Extremadura-- ha abierto la caja de pandora a modo de protesta por una serie de exigencias económicas y cuestionando la calidad del festival en las últimas ediciones.

LA POLEMICA EN CIFRAS

El presupuesto actual del Womad en Cáceres es de 480.000 euros, unos 80 millones de pesetas. A esta base el sello Womad exige para el 2004 una subida del 5% además de ofrecer una fórmula de festival que suprimiría el primer día de espectáculos, es decir, el festival comenzaría el jueves en lugar del miércoles como viene sucediendo en las últimas ediciones.

El consorcio considera excesiva la subida --mucho más cuando en el 2001 ya hubo un incremento de 25 millones de pesetas-- y ha hecho pública su decisión de que si Womad no hace ciertas concesiones a un viejo cliente (el festival se viene celebrando en Cáceres desde hace 12 años) potenciarán un festival alternativo en la ciudad de similares características, organizado desde Extremadura y sin la presencia del sello internacional Womad.

A finales de este mes se dará a conocer el resultado de las negociaciones con la organización del certamen, que en España está representado por Dania Dévora.

Por su parte, Womad España aseguró en un comunicado que toda esta polémica ha sido una sorpresa para ellos asegurando que "si en Cáceres se ha acabado el entendimiento y la hospitalidad, nosotros somos los primeros en no querer estar allí donde no desean que estemos". Dévora también aclara que la subida del presupuesto se debe al IPC.

El debate está servido, una vez más.