Hilda Tardía, directora de la Institución Africana para el Fortalecimiento y Empadronamiento de las Mujeres Jóvenes, regaló a la directora de la Oficina de Cooperación al Desarrollo de la Uex, Inmaculada Sánchez, una jirafa, asegurándole que su mirada era la de una jirafa. Al principio Sánchez no entendió la metáfora y Hilda Tardía le agradeció que en la organización de este encuentro se hubiera mirado al continente africano con la perspectiva de una jirafa, desde arriba, para ver no solo la realidad que habitualmente nos llega sino comprender otras perspectivas. "Intentando que la cooperación sea de igual a igual porque ellos también nos tienen mucho que enseñar", aseguraba Sánchez. En esta línea, esta profesora de la Facultad de Educación de la Uex aseguraba que "no se trata de llegar al continente africano y decirles lo que tienen que hacer para mejorar, sino de preguntarles en qué les podemos ayudar".

Un ejemplo, la directora de la Oficina de la Uex dijo que Hilda le contó que en su país había chamanes que utilizaban unas plantas contra la malaria y después se demostró que el principio activo de esas plantas era efectivo para combatir la enfermedad.

Inmaculada Sánchez también aclara que hay que distinguir entre cooperación internacional y cooperación al desarrollo. Esta última no consiste en que un profesor tenga ganas de pasar una temporada en Kenia dentro de un programa, sino que además debe aportar un plus para trabajar por el desarrollo de ese país.

En un momento en el que los indicadores de pobreza han ido a peor, iniciativas como las de este foro internacional son muy necesarias. Sánchez no se rinde y recuerda que "somos la primera generación que podemos acabar con la pobreza".