El Cebit, la mayor feria de la tecnología y la informática mundial, cerró el 16 de marzo las puertas en Hannóver (Alemania) con un mensaje claro: la convergencia es el futuro. Las principales novedades son productos que aúnan varias funciones, que se comunican entre ellos formando una red y que sirven para divertirse, para trabajar y para la vida diaria. Se acabó eso de usar un aparato para cada cosa. Telefonía sobre internet, móviles con cámaras de fotos de alta resolución y pantallas planas con múltiples capacidades son los ejemplos más destacados.

La feria ha dejado claro que el futuro de la telefonía pasa por internet. Siemens lo dijo bien alto con la presentación del terminal Gigaset S35 y de adaptadores para el PC. Cisco y 3Com también presentaron terminales y soluciones IP para empresas. "Prevemos que en el 2010 en Europa sólo habrá telefonía IP. No hará falta línea de teléfono, sólo una de banda ancha", explicó Werner Pawelczyk, jefe de producto de Siemens. El teléfono está dejando de verse como un aparato y está pasando a ser una función más de los dispositivos. Así, marcas como LG o Siemens sugieren que la telefonía del futuro podrá llevarse a cabo a través de la TV con una conexión de banda ancha, unos auriculares, cámara y micro.

ORDENADORES

Sobre este mundo de servicios digitales, los ordenadores han cambiado funciones y aspecto. Cebit mostró sobre todo portátiles, que destacaban por las pantallas amplias aunque cada vez más ligeras, sobre un mar de carcasas de colorines para PC de sobremesa. Los nuevos portátiles se basan en la segunda generación del procesador Intel Centrino, con sintonizador de televisión incorporado, que permite, por ejemplo, ver un DVD sin tener que arrancar el sistema operativo, como los Toshiba o los Samsung. Con tarjetas gráficas, conexión inalámbrica 802.11g, y con software de edición de vídeo de serie. Microsoft, en este sentido, insistía en su Windows Media Center, el sistema operativo que convierte el PC en gestor del ocio doméstico.

También un gran número de plasmas y LCD lucían este año la etiqueta de Preparadas para la alta definición , el reto de la tele en los próximos años. Los fabricantes se han esforzado en destacar las mejoras en calidad de imagen ("la reina de la casa se ha hecho mayor", según un directivo de LG) y en mostrar la TV como un producto polivalente que sirve también para escuchar música, ver fotos y disfrutar del PC. LG, por ejemplo, mostraba un plasma con conexión USB. Este año, la carrera por presentar la tele más grande la ha ganado Samsung en todas las categorías: un plasma de 102 pulgadas, un LCD de 82 y un retroproyector de 71. El DVD, por su parte, es ya el estándar de facto para grabar y reproducir, por lo que la única consideración de compra es el audio y los formatos que un aparato admite para grabar.

Las marcas han optado, según presentaron en la feria, por acogerlos todos y dejar al usuario que decida cuál quiere usar, si DVD-RAM, DVD+R o DVD-R, y si opta por hacerlo en discos o dejarlos en el disco duro.