Son los grandes olvidados de las operadoras, aquellas ofertas que se busca no destacar en la página web, para beneficiar a las conexiones de pago, pero, aunque es una tendencia a la baja, los internautas españoles se resisten a abandonar los accesos gratuitos para conectarse a internet. Es decir, sólo pagan por el consumo del teléfono. Tan sólo las líneas ADSL restan cada vez más al casi 50%, según cálculos del sector, que aún navega gratis, el gran grupo de los tres tipos de acceso: el gratuito, la tarifa plana y la banda ancha.

De los más de 11 millones de personas (31,4% de la población) que aseguran conectarse regularmente a la red, según las cifras del Estudio General de Medios (EGM), el 61,9% lo hace desde casa. Y ahí las cifras son apabullantes en favor de los gratuitos: más de 5 millones de clientes de Terra (y sólo 115.000 de tarifa plana); más de 100.000 de Auna; 200.000 gratuitos de Tiscali... Incluso Telefónica de España, tiene un 60% de clientes de banda estrecha aún con acceso gratuito (aunque la operadora incluye aquí los usuarios de bonos). Wanadoo, en cambio, se niega a dar cifras sobre sus 1,3 millones de clientes de acceso telefónico, aunque heredó una ingente masa de clientes de Eresmas.