El mundo del cine se vistió la noche del pasado jueves de largo en Berlín para celebrar el estreno europeo de King Kong , la última entrega del realizador neozelandés Peter Jackson.

Jackson acudió al teatro de la Postdamer Platz, epicentro del festival de cine de Berlín, la Berlinale, con los actores Naomi Watts y Adrien Brody, protagonistas de la película, estrenada a principios de la semana en Nueva York. Tampoco faltó al estreno europeo de este clásico Andy Serkis, el animador de la mímica computerizada de King Kong.

Unos dos mil invitados pisaron la alfombra roja hasta el interior del cine, aclamados por centenares de seguidores y curiosos. La cinta, de tres horas de duración, pasa a taquilla esta semana en todo el mundo y, como destacaron los medios alemanes, saldrá a la gran pantalla con el beneplácito de las asociaciones de defensa de los animales, pues no se utilizaron gorilas de verdad en el rodaje.