Volkswagen lo ha logrado. Ha diseñado, construido, comercializado y pronto, muy pronto, entregado el coche más fabuloso. El número uno del automovilismo deportivo de lujo. Se llama Bugatti Veyron. En sus entrañas hay un motor central de 16 cilindros, que arroja 1.001 CV de potencia. Su precio, como no, único: un millón de euros, 1,2 millones impuestos incluidos.