La próxima generación de consolas de videojuegos tendrá películas, música y vídeo en alta definición, además de conexión a internet de banda ancha integrada, videomensajes, controles inalámbricos y sonido multicanal.

Además, serán los nuevos centros del ocio doméstico, con posibilidad de descargar archivos de otros dispositivos, como cámaras, ordenadores, reproductores de MP3 y tarjetas de memoria.

El nuevo episodio de la batalla por el ocio en el salón tiene dos nombres y dos fechas: Microsoft, con su Xbox 360, la próxima Navidad, y Sony, con Playstation 3, la primavera del 2006. Ambas se presentaron en Los ángeles el pasado miércoles como anticipo a la feria E3, la más importante del mundo de los videojuegos que se inauguró el jueves.

PRESENTACIONES POLEMICAS

Las presentaciones, con apenas dos horas de diferencia, vinieron marcadas ya por la polémica. Microsoft quiso ganar esta vez la campaña mediática a su gran rival, Sony, y, en un gesto sin precedentes en la industria, anunció los detalles de su Xbox 360, dos días antes en un documental que emitió la cadena de televisión MTV. El pasado miércoles, sin embargo, durante el acto oficial de puesta de largo, Robbie Bach, el superjefe de la división de Xbox, no tuvo ni la mitad del entusiasmo que había cosechado la multinacional japonesa horas antes, y los únicos aplausos desbocados que recibió fueron los de un grupo de figurantes contratados.

Sony, sin tanta fanfarria, dejó a los asistentes boquiabiertos. En una espectacular presentación ante 2.000 personas en sus estudios cinematográficos, Ken Kutaragi, padre de la primera Playstation, anunció el tercer retoño: Playstation 3. "Una consola con la capacidad de un superordenador", anunció. Y no era broma: si las características que anunció Kutaragi son ciertas, la nueva consola debería estar sobre el puesto 150 del Top 500, la lista de los superordenadores más potentes del mundo. Es decir, con la excepción del Mare Nostrum, estaría por delante, por ejemplo, de cualquiera otra supermáquina española.

La clave para tanta potencia es un chip de procesamiento, el Cell Processor, desarrollado conjuntamente por IBM, Toshiba e Intel, que es, de hecho, muchos procesadores a la vez, y otro chip gráfico, creado por Nvidia, que es, según su presidente, Jen-Hsun Huang, "dos veces más potente que la tarjeta más potente del mercado" y que utiliza "una granja de procesadores que permite crear imágenes como en las películas pero en tiempo real".

Tanta potencia tiene una única justificación: poder trabajar con imágenes de alta definición, es decir de 1080 líneas, en lugar de las 625 que tiene la televisión convencional. El formato, que comienza a implantarse en Estados Unidos y Japón, está en Europa centrado en un único canal por satélite, Euro 1080. La alta definición la compartirá también la nueva Xbox 360, pero con un matiz: mientras que en la Playstation 3, las 1080 líneas son progresivas, es decir, nativas, en la máquina de Microsoft se consiguen por interpolación, esto es, que el hardware añade algo.

Por tanto, y pese a que el ejecutivo Peter Moore, de Xbox, anunciara que "los juegos se verán bien con un televisor normal", el máximo provecho se obtendrá con pantallas de plasmas o LCD que soporten alta definición. Y, por supuesto, necesitará una capacidad de almacenamiento mayor. Ahí, mientras la nueva Xbox mantiene los DVD de doble capa, la nueva Playstation opta por el Blu Ray, uno de los dos formatos destinados a suceder al DVD y que tiene seis veces su espacio. Otra característica que compartirán ambas máquinas será la inclusión de conexiones a internet de banda ancha por controladores Ethernet y por vía inalámbrica. La misión principal es el juego on line --Xbox anunció que pronto llegarán a los dos millones de suscriptores de su servicio de juego por internet, mientras que Sony no dio cifras--.