Hasta Semana Santa la mayor parte de los universitarios tienen que pasar el curso como pueden a la espera de recibir la ansiada carta que les indica que ya tienen a su disposición el dinero de la beca. De hecho, varias entidades financieras ofrecen a los universitarios la posibilidad de un préstamo que les adelanta ese ingreso.

Parece ser que esta situación mejorará si la ministra de Educación, María Jesús San Segundo, ve cumplidos sus objetivos. Asegura que su intención es acometer una profunda reforma de la gestión de los programas de becas para mejorar su eficacia, con el fin de que los estudiantes perciban esas ayudas en el primer trimestre del curso, preferiblemente durante los meses de octubre y noviembre. Además, la ministra destacó que uno de los primeros acuerdos del Consejo de Ministros ha sido aprobar un crédito extraordinario para incrementar las becas y decidir una elevación del gasto en esta materia para el próximo curso de 66 millones de euros.

Otro de los compromisos del nuevo Gobierno afecta a los becarios de investigación ya que se ha comprometido a resolver los problemas creados por la falta de equiparación de las becas de Formación de Personal Universitario (FPU) y Formación de Personal Investigador (FPI) e incluirá a todos estos becarios en el régimen de la Seguridad Social a partir del 2005.

Por su parte, la Federación de Jóvenes Investigadores Becarios-Precarios felicitó al Ministerio de Educación por extender la cotización de la Seguridad Social pero reclamó contratos para todos, tanto predoctorales como postdoctorales.

Los becarios demandaron recientemente al secretario de Estado de Universidades e Investigación, Salvador Ordóñez, la definición de la carrera del investigador, estabilidad para las jóvenes vocaciones y que no haya distinción entre comunidades autónomas y se equiparen salarios.