La situación financiera de la Uex atraviesa un momento delicado. La universidad extremeña cerró el pasado ejercicio con un déficit de 3,2 millones de euros (533 millones de pesetas) y las previsiones de la institución para este año son que el descubierto supere los 4,2 millones de euros (unos 700 millones de pesetas). Las consecuencias de este desfase en los gastos de funcionamiento son, entre otras, las dificultades para pagar nóminas de trabajadores o los numerosos retrasos que sufren los proveedores en sus cobros --cada vez hay menos dispuestos a trabajar con la Uex por este motivo. Así se lo comunicó el pasado jueves el rector, Francisco Duque, a los miembros del Consejo de Gobierno, a los que presentó un informe económico antes de comparecer ante los medios de comunicación para dar a conocer a la sociedad extremeña, de "forma transparente", la situación en la que se debate la universidad, aunque incidió en que "no es caótica" y que "no debe cundir el desánimo entre la comunidad universitaria porque saldremos adelante".

No obstante, Duque advirtió de que, de continuar así, "cuando esto sea insostenible el siguiente paso será no pagar a Hacienda y el siguiente no pagar los sueldos".

UN ANTIGUO DESFASE

El informe presentado por el rector se remonta al año 98, desde entonces existe un desfase en los presupuestos que ha ido creciendo en cada ejercicio hasta alcanzar el pasado lunes, aseguró, un descubierto cercano a los 4,5 millones de euros. Sí dejó claro Francisco Duque que "no hay que buscar responsables" de lo que ha ocurrido, ya que consideró que la gestión y las decisiones tomadas en el pasado se han adoptado de forma colegiada por los órganos correspondientes, por lo que "la responsabilidad de lo bueno y lo malo es de la comunidad universitaria".

El paso siguiente será remitir el informe a la Junta de Extremadura para que conozca el estado de la universidad, ya que la Administración regional es una de las dos grandes fuentes de ingresos de la Uex --las transferencias del Gobierno regional para el capítulo de personal cubren el 90% de las nóminas--. La otra proviene de las tasas de matrículas y administrativas, unos ingresos que, según Duque, no son suficientes para poder hacer frente a las necesidades económicas.

También incidió el rector en que la Uex no debe reclamar una solución a la administración si no da "alternativas" que deben encaminarse a una gestión "correcta y transparente". Por ello, aseguró que se iniciará un estudio para conocer las posibilidades con las que se puede hacer frente al problema.

En cuanto al origen del desfase financiero, Duque señaló que existen diversas causas, una de ellas la mala previsión con la que se aprobaron las nuevas titulaciones, lo que atañe directamente al número de profesores.

El resultado es que de las 230 plazas de docentes funcionarios que se planificaron se han cubierto sólo 138, al contrario de lo que ha ocurrido con los profesores contratados. Se hicieron un 200% más de contratos de los previstos inicialmente.

La consecuencia ha sido que, entre el dinero que se ahorra la Uex por no cubrir todas las plazas de docentes funcionarios y el que se gasta por los contratos de más, se produce un déficit anual de 721.214 euros (más de 220 millones de pesetas).

Las malas previsiones también afectaron al capítulo de personal de administración y servicios, en donde los errores en las contrataciones producen cada año un descubierto de 1,5 millones de euros (250 millones de pesetas). Otra de las claves está en la construcción de edificios que cuentan con un elevado coste de mantenimiento para las arcas de la universidad extremeña.

Un claro ejemplo de la difícil situación que atraviesa la universidad extremeña es el puesto por el propio rector que asegura que cuando llega un mes especial, como es el caso de junio con las pagas extraordinarias, la universidad debe hacer un esfuerzo en los pagos de nóminas que conlleva un importante retraso en el pago de los servicios a los proveedores.

NECESIDADES URGENTES

Respecto a los edicificos de la Uex, para solventar las necesidades más urgentes se necesitarían 14 millones de euros (más de 2.300 millones de pesetas), una cantidad con la que sólo se podrían subsanar los problemas más graves.

Los datos pertenecen al informe elaborado por los técnicos de la universidad sobre el estado del patrimonio e infraestructura de la Uex y que el pasado jueves presentó el rector, Francisco Duque, al Consejo de Gobierno de la institución.

Duque señaló que muchos de los edificios son muy antiguos y presentan numerosos problemas, entre ellos sobrecargas en los circuitos eléctricos, problemas de desagüe, de abastecimiento de agua o sobrepeso que no estaba previsto cuando se construyeron. "El deterioro es tan alto que los fondos que se destinan a ese tipo de reparaciones no son suficientes y no acaban con los problemas", reconoció el rector.

LOS MAS AFECTADOS

De los cuatro campus, los más afectados son el de Badajoz, en donde los problemas provienen fundamentalmente de la antiguedad de los edificios, y el de Cáceres, que, a pesar de que cuenta con instalaciones más nuevas presenta un importante deterioro de carácter urbanístico.