Enterrando años de avance en la lucha por eliminar el estigma de la homosexualidad como sinónimo de sida, las autoridades de Estados Unidos anunciaron recientemente nuevas normas que prohíben donar esperma a los homosexuales con vida sexual activa. Las nuevas reglas del Departamento del Medicamento vetan de los bancos de semen a cualquier homosexual que haya mantenido relaciones en algún momento de los cinco años previos a la donación, haya utilizado protección o no y sin importar lo que digan sus análisis de sida. Sólo se deja abierta la posibilidad de que los gays donen esperma a amigos o familiares. La medida forma parte de una nueva regulación que extiende los controles que ya existen en las donaciones de sangre y órganos al esperma y los óvulos.