El delegado de Educación del Ayuntamiento de Mérida, Francisco Robustillo, y el delegado de Universidad, Luis María González, propusieron la pasada semana la ubicación de la Escuela Oficial de Idiomas (EOI) en el campus universitario de la ciudad como "única" solución para atajar las "deficiencias" que arrastra el actual centro.

Así, descartaron el traslado de la Escuela al edificio de la antigua Escuela Politécnica porque éste es de propiedad municipal y actualmente acoge "materias importantes para la ciudad" como la Policía Local, asuntos sociales y en breve, la Gerencia de Urbanismo.

Francisco Robustillo calificó de "infantil" la insistencia de que el centro de idiomas fuese a parar al edificio de la Politécnica y recordó que este edificio es "de Mérida y para Mérida", y más cuando las competencias en materia de educación las tiene el Gobierno regional, y para éste la EOI "no es una prioridad", dijo.

Los responsables educativos del Ayuntamiento de Mérida mantuvieron que el consistorio no tiene "ningún inconveniente" en ceder los terrenos necesarios para la construcción de una nueva Escuela Oficial de Idiomas en el campus, y que en varias reuniones con los responsables de Educación de la Junta se les ha ofrecido esta posibilidad, aunque no han recibido respuesta alguna.

El delegado de Educación, Francisco Robustillo indicó que con la nueva ubicación se llenaría de contenido el campus emeritense, por lo que animó a la Universidad de Extremadura a establecer contactos con los responsables de la Junta.

González puso a la Escuela Oficial de Idiomas de Mérida como el ejemplo de una "convivencia pacífica" entre ella y una institución pública, como es el Instituto Extremadura, ya que los idiomas se imparten en horario de tarde en las aulas del instituto.

González apostilló que actualmente ningún alumno se ha quedado sin matricular y apuntó que si esto ocurriese en el próximo curso, él dimitiría de su cargo como responsable de Universidad.