Treinta personas sanas, de 18 a 55 años, recibirán de forma voluntaria el próximo enero en los hospitales Clínic, de Barcelona, y Gregorio Marañón, de Madrid, las primeras inyecciones de una vacuna contra el sida que busca atenuar los efectos de una infección por VIH. El fármaco intentará evitar que los seropositivos desarrollen las enfermedades que definen al sida, pero se deberá administrar antes de que el contagio se produzca, en individuos sanos. El ensayo, sin precedentes en España, no conluirá antes de diez años.