L sudorosa lucha contra la piratería propició la semana pasada un concierto infrecuente. Estopa actuó en Barcelona ante 800 entregados fans que, para adquirir la entrada, debían haber mostrado un ejemplar original del último disco del tándem de Cornell , Voces de ultrarumba . No fueron los primeros. Pastora y El Canto del Loco ya actuaron a través de este método. La dimensión adquirida por Estopa, considerados los indiscutibles número uno en el top manta, ha dado mayor relieve a la propuesta.

El grupo, no obstante, no se tomó el concierto como un manifiesto antipiratería. "No nos lo planteamos así. No es anti nada", apuntó David Muñoz horas antes de saltar al escenario. "Es un regalo para el comprador del disco original. En realidad, es un regalo para los fans más extremos. La lástima es que no cupieran más", añadió.

La idea de la cita de ayer partió de la discográfica de Estopa, Sony BMG."Es una manera de fidelizar al comprador de discos y de premiar al fan de verdad"afirmó.

Los hermanos Muñoz ya habían actuado antes en Madrid con las mismas condiciones. Fue, en ambas ciudades, un espectáculo más corto de lo habitual, de precio reducido, en que ante todo se repasó Voces de ultrarumba . "Queremos demostrar que este disco se puede hacer bien en directo", proclamó el locuaz David tan pronto pisó el escenario, enfundado en una camiseta con una inscripción graciosa: Santa Coloma State University.

TOMA DE CONTACTO

"Para nosotros --señalaría antes David Muñoz-- este show nos sirve de calentamiento de cara a la gira, probar en directo las nuevas canciones y, a la par, tomar contacto con nuestro público".

Este público, huelga decirlo, se divirtió con la cercanía que permitía la sala, las intervenciones espontáneas de los hermanos y el nuevo y furioso repertorio. A David y José Muñoz casi no les hacía falta cantar; su gente demostró saberse ya de memoria las letras de Voces de ultrarumba, del que llevan vendidas casi 400.000 unidades. Las distancias con el público se ampliarán el 15 de junio, cuando el dúo actúe en el Sant Jordi, dentro de la gira española. Las entradas ya están a la venta.

De alguna manera, el concierto de ayer sustituyó al que Estopa quería desplegar en el Liceu como chupinazo de la gira. Cuestiones técnicas, de acoplamiento con el grupo que acompaña a Estopa, han impedido el acontecimiento. La intención ahora es fijar una fecha en el teatro lírico para el fin de la gira. Una forma suntuosa de dar el carpetazo. Las negociaciones están en marcha.