Cuántas atrocidades se comenten y se han cometido y se seguirán cometiendo en nombre de un dios o de unas creencias religiosas? La respuesta a esta preguna iniciaría un listado de barbaridades que parecería no tener fin. La escritora madrileña Julia Navarro, autora de títulos como La hermandad de la sábana santa o La biblia de barro , aborda el fanatismo religioso en su tercera novela, La sangre de los inocentes , que salió la semana pasada a la venta de la mano de Plaza & Janés y Círculo de Lectores.

En esta obra Navarro escudriña el fanatismo en distintos periodos históricos. Así, comienza con las hogueras de la inquisición para continuar después con la segunda Guerra Mundial y acabar con los conflictos actuales entre Oriente y Occidente. Así, la intolerancia de la Inquisión, la sinrazón fascista o el integrismo islámico se dan la mano en La sangre de los inocentes , un libro sobre la venganza y la traición. "Se trata de un ´thiller´ de aventuras que aborda un problema tan viejo como el mundo, el fanatismo religioso", ha declarado la autora a Europa Press.

Navarro viaja en su última novela por ciudades como Jerusalén, Granada, Roma o Estambul para indagar en las causas del fanatismo religioso y la intolerancia a lo largo de los siglos.

LA TRAMA

El libro se inicia con la frase de Fray Julián, un notario de la Inquisición cuando recibe la misión de relatar los enfrentamientos producidos en Montsegur (Francia) a mediados del siglo XIII. "Soy espía y tengo miedo".

Para la autora, que tiene un largo currículum como periodista y en la actualidad es analista política de la agencia OTR/Europa Press, "todo en esta vida tiene un trasfondo político. La religión está manipulada por los políticos", aseguró recientemente.

Julia Navarro añadió a esta reflexión que "es preocupante que haya quientes quieran hacer un gran negocio con los enfrentamientos".

Las luchas de poder entre los cátaros y el control que, en nombre de la fe, lleva la Inquisición, propiciarán que la crónica del fraile sea un valioso tesoro a descubrir. Su última frase --"algún día, alguien vengará la sangre de los inocentes"-- se convertirá en un enigma a descifrar. Siglos después, poco antes de iniciarse la Segunda Guerra Mundial, el conde d´Amis, descendiente de las grandes familias cátaras, recibirá como legado la crónica de Fray Julián.