DIRECTOR: Ron Howard.

ACTORES: Tom Hanks, Ayelet Zurer, Ewan McGregor, Stellan Skarsgard.

DURACION: 138 minutos.

Debido a la popularidad de la novela de Dan Brown en que se basa, El código Da Vinci (2006) fue un thriller muy taquillero pese a ser tremendamente insípido y aburrido. Ron Howard, su director, actuó según la ley del mínimo esfuerzo y, aun así, llenó los cines. Pues bien, en Angeles y demonios , adaptación de otro superventas del mismo autor (escrito antes que El código Da Vinci ), el director de El desafío: Frost contra Nixon (2008) ha querido repetir la jugada.

Fiel adaptación de la novela Angeles y demonios tiene una historia y una estructura muy parecidas a las de aquella película. Sin embargo, varias cosas hacen de ella una propuesta más atractiva que El código Da Vinci . La primera, la aportación de David Koepp, que firma el guión con Akiva Goldsman. A él se deben, sin duda, el atractivo misterio de algunos personajes y las eficaces piruetas finales de la película.

El protagonista, el experto en símbolos al que vuelve a dar vida Tom Hanks, tiene tan poca personalidad como en El código Da Vinci . Le falta carisma, algo que justifique su papel principal. Pero, si en aquella cinta los secundarios eran tan insulsos como él, en Angeles y demonios le hacen sombra. Koepp y Goldsman proponen personajes secundarios atractivos por su ambigüedad y opacidad, porque nunca está claro si son lo que parecen. Y se sirven de la falta de transparencia de estos para manipular las expectativas del espectador en un tramo final que no derrocha ingenio pero engancha por juguetón. El guión tiene, por tanto, más chispa que el de El código Da Vinci . Pero no es lo único que distingue a Angeles y demonios de su antecesora: también está más cuidada en sus atmósferas y rodada con más agilidad.