Habitualmente los Maestros en Audición y Lenguaje atienden los problemas relacionados con los trastornos del habla y de la escritura de escolares extremeños, que son de vital importancia para el desarrollo intelectual de estos pequeños. En la práctica, estos especialistas se encuentran con niños que padecen dislalias (trastornos de articulación de fonemas), retrasos en la adquisición del lenguaje, y disfemias (tartamudez); junto a otras patologías como Síndrome de Down o parálisis cerebral. Ahora, ante un marco asistencial educativo cada vez más ambicioso, su perfil parece necesitar ampliarse hacia un profesional que diseñe nuevos materiales pedagógicos y que, en definitiva, se adelante preventivamente a las disfunciones padecidas por escolares.

En la Universidad de Extremadura, bajo las siglas giAL (Grupo de Investigación de Audición y Lenguaje y Animación Lectora) viene trabajando en ese ámbito específico de la formación de educadores, un emergente grupo de expertos, liderados por los profesores Angel Suárez, Eloy Martos y Juan Manuel Moreno. Las acciones emprendidas por este Grupo se inician en 2001, cuando en la Uex se gradúa la primera promoción de Maestros Especialistas en Audición y Lenguaje. Los expertos que integran el giAL detectan que es necesario aumentar el número de prácticas y los materiales puestos a disposición de los alumnos. En la actualidad, esta carrera, impartida en la Facultad de Educación, aparece como una de las más demandadas y en el mes de junio suele quedar cubierta la práctica totalidad de plazas.

MISION DEL GIAL

En Extremadura, los maestros especialistas en Audición y Lenguaje que trabajan en el ámbito de la enseñanza pública, desempeñan una labor itinerante y cada profesor se ocupa de atender una media de tres centros educativos. Su tarea tiene un carácter todavía muy terapéutico y se centra en tratar las alteraciones y problemas que sufren niños con edades entre los 3 y 12 años. "Queda aún lejos la posibilidad de que estos profesionales puedan anticiparse a las patologías padecidas por cientos de escolares en la comunidad autónoma, y así desarrollar una función que debería estar más encaminada hacia lo preventivo", afirma Angel Suárez, coordinador del giAL. Una de las consignas que reciben los futuros maestros en Audición y Lenguaje a su paso por la Universidad, es que cuando vayan a los colegios "deben orientar su esfuerzo hacia el diseño de programas y a propiciar la colaboración con los tutores, con el objetivo de atajar la gravedad de las posibles disfunciones", explica Suárez.

Esto colectivo ha publicado seis manuales desde el momento de su constitución. Estos libros, bajo un diseño eminentemente práctico, han venido ofreciendo a lo estudiantes universitarios las pautas más novedosas de la Especialidad en Audición y Lenguaje. Han sido elaborados gracias a las experiencias reales de numerosos maestros, "vividas en colegios de la región". El proyecto de publica