La definición de biocombustible es bastante básica. Los combustibles se obtienen a partir de materias vivas presentes en la superficie terrestre, también denominadas biomasa. No es de extrañar, por lo tanto, que exista cierta diversidad entre los biocombustibles aunque sólo distinguiremos entre biodiésel y bioetanol. El primero puede utilizarse en los automóviles diésel, mientras que el bioetanol puede hacerlo en los que recurren a motores de gasolina. Eso sí, en muchas ocasiones será necesario realizar cambios y adaptaciones. En ambos casos, el rendimiento de los motores no solo es superior, sino que además, en muchos casos, va asociado a una mejora en las prestaciones dinámicas que presente el coche.