En sólo cuatro días Cáceres será tomada por los miles de amantes de los sonidos más duros que se congregarán en la ciudad con motivo de uno de los festivales más cañeros del momento. Serán cuatro días en los que la ciudad despertará de su letargo para sumergirse en un mar de sonidos con los que el Extremúsica 2006 pretende demostrar que es el festival más importante de oeste español.

El cartel que la organización ha confeccionado bien serviría por sí sólo para demostrar la importancia de esta cita musical, además no se han escatimado medios con tal de no defraudar a los miles de jóvenes que se esperan esos días en el hípico de Cáceres. Dentro de los grupos participantes no faltan las viejas glorias, los grupos más duros o los sonidos más comerciales. Todo, en 33 conciertos que completarán las más de 30 horas de música en Cáceres, con predominio del rock, pero con un importante abanico de tendencias que abarcan "desde el rock urbano, hasta el heavy metal, pasando por el hard rock de toda la vida, el ska-- que se incluye en esta edición-- el flamenco, el punk y el nuevo metal", contaba el Angel Romero, director de la productora A Vallecas Producciones, durante la presentación del macrofestival el pasado mes de noviembre.

Grupos como Loquillo y los trogloditas, Barricada, Sínkope, Kiko, Veneno, Pereza, Barón rojo, Mojinos Escozíos, Boikot o Porretas componen el cartel de uno de los eventos más multitudinarios del año en Cáceres.

MEJORAS

El recinto hípico espera una avalancha aún mayor que la del año anterior, que congregó a 30.000 jóvenes, y para ello no se han escatimado medios ni reformas. Lo importante es que todo esté a punto para la cita que se inicia el 31 de marzo. Para que nada consiga deslucir este evento, el ayuntamiento ha llevado a cabo una serie de reformas destinadas a mejorar el suministro eléctrico del recinto, pero también a garantizar la seguridad de los miles de asistentes que se esperan.

También se han adoptado medidas para que los asistentes cuenten con todas las comodidades, sin necesidad de salir del hípico durante las dos jornadas de conciertos. El concejal de festejos en Cáceres, Lázaro García, lo definía como "una auténtica ciudad musical". En ella no faltará ni un detalle para dotar a los asistentes de todo lo necesario. Esto incluye una mayor zona de acampada que se ha desplazado a la izquierda de la del año pasado. Quieren evitar que, tal y como sucedió en la pasada edición, algunas tiendas de campaña acaben instaladas en los aparcamientos, que también en esta ocasión contarán con más espacio. Además se ha incrementado el número de baños móviles para evitar las colas y aglomeraciones del año pasado y se va a instalar un supermercado en las inmediaciones del hípico.

Tampoco faltarán las carpas exteriores habituales, los bares, los restaurantes y una curiosa novedad que viene a complementar la oferta propuesta musical del Extremúsica. Así está prevista la instalación de un mercadillo medieval en llos aledaños del hípico, en el que no faltará las danzas y los juegos malabares, todos ellos en una una zona donde habrá una recreación en cartón piedra de una ciudad medieval.

El Extremúsica 2006 contará con más potencia de sonido, pero hay más novedades. Las mejoras entorno al festival afectan, y mucho, al cartel; sobre todo por el incremento de grupos que ha experimentado en esta edición. El Extremúsica ha pasado de 25 grupos a 33, y de 24 horas de música a 36.

MAS MUSICA

Para que no haya ni un minuto de parón, los organizadores han diseñado este año un espacio con dos escenarios contiguos en el hípico. El propósito es agilizar la sucesión de los conciertos.