Los estudiantes franceses bloquearon la semana pasada 39 de las 84 universidades del país para hacer patente su rechazo al nuevo tipo de contrato laboral para los jóvenes aprobado por el Parlamento y que consideran precario.

Se trata de un contrato para compañías de más de veinte empleados que permite al empresario despedir a los menores de 26 años en los dos primeros años sin justificación.

Las organizaciones de estudiantes promovieron estos días diversas acciones que alteraron el funcionamiento de las universidades, hasta llegar a casi la mitad de todas las que hay en Francia, según datos facilitados por el sindicato Unión Nacional de Estudiantes de Francia. En algunas de ellas las asambleas estudiantiles votaron la paralización de las actividades docentes, mientras en otras se establecieron piquetes. En La Sorbona de París un centenar de jóvenes pasó la noche en las dependencias y sólo funcionaron algunos cursos de doctorado.