El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, afirma que los datos de 2009 del sector turístico en la región son para estar "razonablemente satisfechos" y vaticina que el sector puede absorber buena parte del empleo que antes estaba en la construcción. "Cuando las cosas se recuperen iremos de 7.000 a 9.000 viviendas nuevas por año, la mitad de lo que se hacía en los años del boom inmobiliario. Hay que preguntarse dónde va a trabajar la gente que antes estaba en la construcción, y ahí puede tener importancia el turismo. Esto se busca trabajando por una mayor calidad, y para eso es importante la capacitación del personal", plantea Vara, para luego recalcar que Extremadura "ofrece turismo de calidad a precio razonable".

Además, indica que la región aguantó el año 2009, con su contexto de crisis, "razonablemente bien", debido a que el sector está "haciendo bien las cosas" en esa comunidad autónoma.

Por eso, considera un éxito que Extremadura abriera el año pasado 39 nuevos establecimientos hoteleros, que tuviera un 2 por ciento más de visitantes, y que las pernoctaciones se incrementaran un 0,7 por ciento. Así, valoró que estas cifras son indicativos de la "fortaleza" del sector, que va "manteniendo un ritmo constante de crecimiento" en la comunidad.

Para Vara, el turismo es un sector estratégico emergente, pues "va a seguir creciendo y será de los sectores que tan pronto como la situación económica se vaya recuperando verá reconocido el trabajo que viene haciendo". Adelantó que a mediados de año espera poder presentar en el parlamento autonómico la Ley de Turismo sobre la que girará todo el sector y que tendrá un componente muy transversal.

Según destaca, uno de los objetivos del sector turístico extremeño sería ampliar de dos a tres las pernoctaciones por visitante, puesto que eso permitiría, con el mismo número de viajeros, "aumentar de forma notable los resultados".

Asimismo, Vara se compromete con los empresarios a que este año entre en el Parlamento autonómico la Ley de Incentivación y Consolidación de empresas, que eliminará muchas trabas burocráticas.

Por último, sobre el turismo basado en el golf, considera que Extremadura toma decisiones basadas en el "equilibrio", de manera que cada zona tenga un campo, y haya "nueve o diez bien distribuidos" por toda la región.