Unas 1.500 personas, según la policía local, participaron ayer en la manifestación convocada por las asociaciones de vecinos de Conquistadores y Zona Centro para protestar contra la privatización e incremento del precio del agua en Villanueva.

La marcha discurrió entre la plaza de San Bartolomé y la de España, donde Antonio Romero, presidente de Zona Centro, leyó un manifiesto, en el que insistió en que el agua, como servicio público, es patrimonio del pueblo, que lo ha perdido tras la privatización. También calificó de "abusiva, inmoral e inaceptable" la subida por la que "muchas familias han visto disminuir considerablemente su poder adquisitivo, cuando es un bien de primera necesidad".

Los manifestantes exigieron que el servicio vuelva a ser municipal; una bajada del precio hasta una tasa razonable y que se devuelva la diferencia de lo pagado hasta ahora; de no ser así, aventuraron, seguirán luchando. En cuanto a la valoración de la convocatoria, Romero se mostró satisfecho sobre todo por la actitud pacífica y respetuosa de los participantes.

VALORACIONES POLITICAS Los partidos políticos presentes coincidieron en su valoración. Según José Antonio Jiménez, del Siex, "es un hecho que demuestra que la política que se ha hecho ha sido errónea y contrarias a los intereses de los ciudadanos; tienen que rectificar". Además dijo que habían acudido 3.000 vecinos.

Para Víctor Fragoso, del PP, ha sido un ejemplo de protesta pacífica y reivindicación de derechos. "Estamos con la gente del pueblo y no vamos a tolerar abusos. La reunión del alcalde para frenar esto es intolerable".

IU, a través de Francisco José Chiscano, coincidió con Siex en el número de asistentes y señaló que "el pueblo quiere que el agua vuelva a su propiedad. Esto es un tirón de oreja al gobierno local", subrayó.