La Junta informó ayer que reparará el techo del aula de Infantil del colegio Nuestra Señora de Piedraescrita de Campanario, "a pesar de que el derrumbe parcial se ha producido porque el ayuntamiento no ha realizado los trabajos de mantenimiento que son de su competencia". La consejera Eva Pérez, por su parte, declaró que "respeta la manifestación convocada por los padres, que no entiende "porque se les ha dado respuesta a sus quejas".

El Gobierno regional hizo pública esta nota después de conocer que un centenar de alumnos no acudieron ayer a clase tras producirse el desprendimiento parcial del techo en la madrugada del martes al miércoles como consecuencia de las goteras de la cubierta del edificio, explicó a Europa Press una Estefanía Elices, de la asociación de padres de alumnos.

Elices dijo que "los tres edificios que tiene el colegio están fatal, con numerosas grietas, barreras arquitectónicas y problemas de calefacción". En el caso del que acoge Educación Infantil, las goteras y los desperfectos son patentes no solo en el aula afectada sino en otras clases y zonas comunes.

Ante esta situación, la asociación ha convocado para hoy, a las nueve de la mañana, una concentración a las puertas del centro e hizo un llamamiento para que ningún alumno acuda a clase como "medida de presión" para que se solucionen estas deficiencias.

CUANDO MEJORE EL TIEMPO En cuanto a la Junta, en su nota indica que las obras se acometerán "en cuanto las condiciones climatológicas lo permitan" y que las aulas de Infantil fueron construidas por la Junta hace 10 años y que, como sucede en todos los colegios de Infantil y Primaria, "es el ayuntamiento el que debería haber acometido los trabajos de mantenimiento, entre ellos impermeabilizar los tejados para evitar las goteras".

También recuerda que los técnicos de la consejería, que ya estuvieron en el centro el lunes, volverán para comprobar el estado de la techumbre y comenzar los trámites para acometer la obra lo antes posible".

Braulio Ramírez, del equipo de gobierno, resaltó a Efe que el derrumbe es "la suma de muchas pequeñas cosas", que el colegio tiene entre 30 y 40 años, que el módulo dañado se hizo hace 4 o 5 para suplir a instalaciones anteriores, y que en malas condiciones también está otro módulo más.