Los trabajadores de la empresa de transporte por carreteras Lisetur han decidido no conducir un autobús que sufra problemas de seguridad, aunque ello implique que haya viajeros con billete queden en tierra. Así lo anunció ayer el presidente del Sindicato Extremeño, Eduardo Franco, después de no llegar a un acuerdo con la empresa en la reunión mantenida el jueves en la Federación de Relaciones Laborales, en Mérida.

Franco explicó que se niegan a volver a intentar negociar con la empresa porque "las condiciones de seguridad son innegociables. No se volverá a poner en peligro la vida de ningún viajero". Por esto han decidido que de no llegar a buen puerto las conversaciones con la administración regional, convocarán huelga indefinida.

Franco se mostró agradecido a la Guardia Civil de Tráfico que desde el lunes levanta acta a los autobuses de Lisetur que circulan con irregularidades o averías. Informó que también ha inmovilizado a dos de los vehículos, uno de ellos ayer por la mañana, por no llevar el permiso de circulación, según ha sabido este diario. Franco dijo que ya hay poblaciones que recogen firmas para protestar por el estado de los vehículos.