Comisiones Obreras y el Sindicato Profesional de Policías Municipales (Sppm) de Villanueva presentaron ayer una denuncia ante la comisaría de la Policía Nacional contra la seguridad privada contratada por el ayuntamiento durante las fiestas patronales de Santiago y Santa Ana. Además, pidieron la dimisión de la concejala de Policía Local, Consuelo León, por la forma en la que ha llevado las negociaciones con los agentes desde que comenzó la protesta policial para reclamar la actualización de los servicios extraordinarios.

Alegan que los servicios prestados por una empresa privada no eran de su competencia y que usurparon funciones a los policías locales. Los representantes sindicales, Manuel Núñez y Julián Moreno respectivamente, explicaron que los servicios prestados contravienen la Ley 23/1992 del 30 de julio, porque se prestaron en lugares públicos y abiertos. Igualmente indican que los vigilantes usaron un vehículo policial el día 22. Ambos sindicatos dijeron que el coste de esta contratación asciende a cerca de 6.000 euros. "Por ese dinero y al precio actual de los servicios extraordinarios de la policía local, podían haber tenido 8 agentes más", dijo Moreno.

Sobre el acuerdo firmado por UGT, CSIF y el ayuntamiento para las 35 horas semanales y la actualización de los servicios voluntarios, afirmaron que lo rechazaron porque supone un grave empeoramiento de las condiciones laborales de los que hacen turno de calle. "Así, en cualquier momento el jefe de la policía puede modificar el horario impidiendo conciliar la vida laboral y familiar de la que tanto hablan", señaló Núñez. Recordaron que de los 35 miembros de la plantilla, CCOO y Sppm suman 26 afiliados mientras que UGT tiene 8 y CSIF ninguno.

Por su parte, UGT considera que el acuerdo es ventajoso para la policía local.