El alcalde de Don Benito, José Luis Quintana, ha contactado en los últimos días con la Policía Nacional y se están coordinando actuaciones para llevar a cabo en el entorno de las casas de apuestas en coordinación con la Delegación del Gobierno ante la posibilidad de que menores de edad pudieran acceder a este tipo de establecimientos o valerse de mayores para jugar. Son medidas disuasorias, pero también pueden llegar a ser coercitivas si se constata que en algún momento no se está cumpliendo con la legalidad en materia de menores.

Así lo señaló ayer el concejal de Servicios Sociales de Don Benito, Juan Francisco Dávila, al ser preguntado sobre la alarma social que se está generando últimamente ante la supuesta proliferación de menores en las proximidades de salones de juegos y apuestas.

El juego y los establecimientos que se están abriendo en los últimos tiempos en Don Benito son totalmente legales, según el edil. «Sin embargo, lo que está prohibido es que los menores jueguen y el que eso no se produzca es competencia de las fuerzas de seguridad del Estado», apostilla Juan Francisco Dávila.

La policía es la que debe controlar que el acceso a los menores no se produzca, en el caso de que los propietarios de los locales o los encargados incumplan la ley, manifiesta el concejal. «La participación de los menores también está prohibida, aunque no sea de forma directa, porque ante situaciones de ilegalidad puede haber subterfugios y que los menores lo hagan a través de amigos que sí tengan la mayoría de edad y puedan apostar por ellos porque dinero sí tienen, aunque sea poco», argumenta Dávila.

«Tenemos que cambiar la mentalidad porque el juego es legal, pero, como en muchas otras cosas, puede convertirse en un problema de salud y un problema social y en el caso de menores no solo pueden hacerlo a través de casas de apuestas, sino ‘on line’; por eso hay que insistir en la concienciación, sobre todo de los progenitores, de que tengan cuidado y establezcan una vigilancia sobre sus hijos, porque si a las doce de la mañana un día laborable hay chavales con mochilas y demás... pues eso indica que no están donde deben de estar y los centros educativos deben extremar la vigilancia para que en los periodos de recreo no salgan de los recintos educativos», subrayó el concejal.

Sus declaraciones se produjeron en el marco de la presentación del protocolo de tratamiento psicológico de la adicción al juego ‘on line’ de la asociación Adat Don Benito

Adat ha sido una de las organizaciones seleccionadas para mejorar el abordaje a dicha adicción en un proyecto impulsado por la Red de Atención a las Adicciones UNAD, en colaboración con la Universidad de Valencia.

La iniciativa arrancó en febrero con una reunión en Valencia, entre estas entidades y el equipo investigador de la universidad.

LA INTENCIÓN / El objetivo es generar conocimiento científico dentro del campo, el de las adicciones sin sustancia, donde no existen referencias comunes en cuanto al abordaje; para conseguirlo se ha optado por un enfoque integral, que aúne la experiencia a pie de calle de la red UNAD con el saber académico.

El proyecto culminará a finales de año con una jornada de presentación de la que será la versión final del protocolo.

El concejal de Servicios Sociales recalcó: «Las adicciones sin sustancia se están convirtiendo en un problema de salud pública, porque afecta a la salud psíquica, además de convertirse en un problema social porque afecta a las relaciones sociales, amistades y familiares». Por ello desde el Ayuntamiento de Don Benito en coordinación con la Secretaria Técnica de Drogodependencias de la Junta de Extremadura, con otros agentes relacionados y con entidades como Adat se trabaja de forma coordinada para establecer medidas y acciones que sirvan para concienciar en un primer término y abordar estas nuevas adicciones.

Desde febrero de 2006 Adat Don Benito lleva ofreciendo ayuda a todas las personas y familias de la comarca, con problemas de adicción al juego o ludopatía, mediante un programa ambulatorio de atención.