La finca municipal Doña Blanca, situada en Don Benito, dispone desde ayer de tres chozos para que se usados como alojamiento rural. Han sido construidos por los 15 alumnos de la escuela taller que lleva el nombre de este enclave, que se han formado en construcción rural durante dos año y que ayer despidieron las clases con la presencia del alcalde Mariano Gallego, el director general del Sexpe, Rafael Pacheco, y algunos concejales.

Los chozos miden 30 metros cuadrados y tienen capacidad para alojar a 18 personas, puesto que cada uno está equipado con tres literas, una mesa y un armario. Se han edificado a semejanza de los antiguos: recubiertos de piedra y el techo cubierto con brezo. Junto a ellos, los alumnos han construido una edificio para los aseos, duchas y lavaderos. También han adecuado en la zona un merendero.

GRATUITO PARA COLEGIOS La intención del ayuntamiento es ampliar las normas de uso existentes para este paraje para incluir estos nuevos servicios y pondrá una tarifa para las pernoctaciones, aunque su disfrute será gratuito para algunos grupos como los centros educativos.

Los 15 alumnos de 16 a 25 años que han participado en la escuela recibieron sus diplomas. Ocho son mujeres y la mayoría sin estudios, aunque 13 han aprovechado para sacarse el título de Educación Secundaria Obligatoria. Esta escuela taller comenzó el 3 de septiembre del 2007 con un presupuesto de 384.000 euros.

Yoana Bahamonde reconocía en nombre de todos sus compañeros que no solo han aprendido una profesión sino que también "hemos aprendido a ser mejores personas y a estar preparados para nuevos retos".