La iglesia parroquial de Santiago de Don Benito está en obras. Se trata de la remodelación de distintas estancias de este templo, bien para ganar en funcionalidad o bien para arreglar desperfectos que han ido surgiendo con el paso del tiempo.

La zona que llama más la atención por su aspecto actual, completamente levantado, es el presbiterio, espacio donde se erige el altar mayor de la iglesia. En esta zona se están llevando a cabo varias acciones. Por un lado se va a renovar el revestimiento de mármol, tanto en escalones como en los frontales laterales, ya que muchos elementos estaban dañados. A su vez, y según ha detallado el párroco Fermín Solano, se va a instalar una reja de hierro en los laterales a modo de valla protectora. Asimismo el propósito es bajar un poco la altura del altar mayor, concretamente un peldaño, para acercarlo aún más a los feligreses.

arreglo de los muros /Otro apartado de la obra se va a centrar en el saneamiento de los muros de la iglesia; en unos casos para subsanar los desperfectos que ocasionó la instalación del cableado eléctrico en la década de los 90. También se van a reparar aquellos fragmentos de muro deteriorados por la caída de cal.

Cercano a la puerta principal hay una pequeña pared que pretende derribar para dejar ver en su mayor esplendor la bóveda. Una vez derribada, se aprovechará para colocar una reja separadora sobre un pequeño museo de objetos religiosos antiguos (casullas, estandartes, o cálices).

Pero si hay una acción indispensable en esta remodelación de la iglesia de Santiago es la reparación de sus goteras. Según Fermín Solano, se centran especialmente en los alrededores de la torre, bien por el paso del tiempo o bien por la acción de las aves, cuyos excrementos originan una pequeña represa, que al llover se libera y da lugar a serios problemas.

También se quiere aprovechar la obra para dotar de una mayor accesibilidad a la iglesia. Según Solano, el edificio recibe la visita de muchos feligreses mayores y la rampa existente en la puerta sur no está en las mejores condiciones. Existe un proyecto del ayuntamiento, pero es a más largo plazo, por lo que el párroco cree oportuno acometer alguna actuación urgente en la zona con alguna rampa provisional. Las obras tienen un coste de 36.000 euros. La mitad es aportada por la Diputación de Badajoz y la otra por la parroquia.