Dos vecinos de las viviendas unifamiliares situadas en la calle Nogal esquina calle Castaño de Don Benito, Rocío Elena y Antonio Carpio, piensan llevar su caso hasta las instancias necesarias para propiciar que la casa en la que viven "sea legal".

Los dos han denunciado que hace casi tres años compraron la vivienda que poseen a la promotora constructora Grupo de Empresas 2000 que, como apuntan a EL PERIODICO, las construyó "sin tener proyecto de ejecución". Un hecho que no pasó inadvertido para el consistorio que notificó, en agosto del 2000, a la empresa la paralización de las obras, al no tener aprobado el proyecto de infraestructuras comunes de acceso a los servicios de telecomunicaciones.

No obstante, y pese al citado aviso, la promotora siguió adelante con las obras, lo que ha dado lugar a que estos vecinos no puedan recibir su pertinente licencia de primera ocupación.

Los demandantes llevaron el caso al Colegio Arbitral de Consumo, que les dio la razón. Pero, como dicen, "no vemos salida a esta situación de ilegalidad".

Por su parte, el dueño de la constructora, José Diestro, ha declarado a este diario que el problema se originó al coincidir con un cambio de normativa. Como dice, en su deseo está solucionar el asunto, aunque para ello necesita una parcela para implantar el centro de telecomunicaciones.