Ayer fue jornada de romerías en buena parte de los pueblos y ciudades de las comarcas de Vegas Altas y La Serena. Alrededores de ermitas, así como casas de campos y chalés, se convirtieron en los lugares elegidos para pasar el tradicional día de la Jira , como se conoce popularmente a esta jornada de Lunes de Pascua. El sol acompañó en líneas generales, aunque algún chubasco esporádico se pudo apreciar en determinados momentos del día.

En Villanueva de la Serena ayer sí pudo lucirse la Virgen de la Aurora. Tocaba su regreso a su ermita y lo hizo en un día con unas condiciones climáticas muy diferentes a las del Domingo de Resurrección que obligaron a suspender la Carrerita por primera vez en la historia. El paso de Nuestra Señora de la Aurora salió después de las 9 de la mañana de la iglesia de la Asunción. Lo hizo arropada por decenas de fieles con el sol como protagonista, aunque con bastante viento. Recorrió diversas calles de Villanueva antes de tomar rumbo a su santuario a través del camino de Pontezuela. Al llegar a la ermita se ofició una misa y después llegó el disfrute posterior de la jornada en los alrededores de la capilla.

Jinetes y carrozas

En Campanario, unos 150 jinetes y diez carrozas fueron protagonistas de la popular romería en honor a la Virgen de Piedraescrita, fiesta de interés turístico regional. Las nubes abrieron paso a un fenomenal sol a la hora del desfile para que el trabajo de varios meses pudiera lucirse. La lluvia hubiese estropeado esta fiesta, ya que las carrozas están adornadas con diversos motivos de colores en papel. El primer premio fue para una simpática carroza sobre el personaje de videojuegos Super Mario Bros. Los motivos alusivos a cuentos infantiles, a la Selva y a las tradiciones inspiraron este año al conjunto de carrozas campanarienses. También el homenaje al triunfo de España en la Eurocopa, la agricultura, una simpática escuela o el oeste americano hicieron las delicias de los asistentes, junto a la gran cantidad de jinetes y bonitos carros tirados por caballos.

La ermita de las Cruces, en Don Benito, volvió a ser, otro año más, lugar de cita para los calabazones. En el Lunes de Pascua se celebró el encuentro entre María y el Resucitado en un lateral del santuario. Mucha gente acudió a presenciar esta carrera entre ambas imágenes. A su conclusión, los dos pasos recorrieron en procesión los alrededores. Este año, como novedad, se unió a esta procesión la imagen de la Virgen de las Cruces. En esta ermita la fiesta continuó con la misa oficiada junto a la Virgen de las Cruces y la degustación de productos típicos.