Joaquín Muñoz e Inés María Garrido de 39 y 28 años y sus dos hijos gemelos de 19 meses han dormido bajo el cielo raso las noches del domingo y el lunes. Desde que regresaron en abril de Sevilla han vivido con la madre de ella, hasta que el domingo discutieron y los echó de casa. Desde entonces, han pasado la noche en el parque de los Conquistadores y ayer, decidieron encerrarse en la casa de cultura. "No tenemos adónde ir y no pienso pasar una noche más en la calle con mis hijos, de aquí no me muevo hasta que no nos den una solución", proclamaba Inés María. Sin embargo, al cierre de esta edición pesaba sobre ellos una amenaza de desalojo por parte de la policía.

Dicen que ayer por la mañana hablaron con el alcalde, pero que "lo único que nos ha dicho es que no podía hacer nada porque no habíamos echado los papeles para la bolsa de trabajo. ¡Qué tiene que ver eso con la situación de emergencia en la que estamos ahora!", se quejaba Inés María.

Sin embargo, admite que una asistenta de los Servicios Sociales llamó por la mañana a un albergue "pero les han dicho que nosotros sí pero que los niños no porque son pequeños, además, yo a un albergue no me voy con mis hijos", aseguró. Llevan sin trabajar desde antes de que nacieran sus hijos y dicen que no comen nada desde el domingo. "Los niños sí porque tienen su leche, sus potitos y sus yogures. No tenemos dinero para un alquiler porque si lo tuviera no estaría montando esto". Tampoco ven posible la reconciliación familiar.

Respuesta municipal

Por la tarde, la pareja se reunió con el edil de Servicios Sociales, Joaquín Pineda, quien informó que hace meses les ayudan con leche, pañales y primera necesidad. También apuntó que se ha comprometido a agilizar la AISSES, una ayuda para el alquiler para casos de emergencia social y añadió que fue en agosto cuando solicitaron una vivienda social pero que es un proceso largo. "Desde la Administración les hemos dado todas las facilidades pero tienen que entender que éstas no son formas, que todo tiene su trámite y que no tenemos viviendas para dar", dijo. Y dijo que les informó de los talleres de jardinería y albañilería del Plan de Barrios en el que se cobra a diario algo más de 6 euros pero que no quieren pedirlo.